Ventanas de PVC VS Aluminio

Cuando toca plantearse una reforma de nuestra vivienda o la construcción de una nueva uno de los puntos clave es la elección de las Ventanas que colocaremos.

No hablamos de su tamaño o del lugar de colocación de las mismas, sino del material de fabricación de la carpintería.
En muchos casos nos acabamos decantando por una u otra opción en función de falsos mitos y medias verdades que se han ido cociendo en el subconsciente general a lo largo de los años.

A continuación vamos a exponer algunas de las cualidades e inconvenientes de los dos principales materiales que hoy en día se emplean mayoritariamente en los perfiles de ventana: el PVC (policloruro de vinilo) y el Aluminio.

Dejamos de lado la madera puesto que se trata de un material que, para que sea eficiente y duradero en ventanas, requiere de un gasto muy superior a lo que se puede conseguir con los otros dos materiales con una inversión mucho menor.

Condensación en las Ventanas

Una de las grandes preocupaciones a la hora de instalar las ventanas y la carpintería correspondiente es la condensación.
Comúnmente se dice que una ventana «suda» cuando vemos esas gotas de agua que se hacen presentes en la parte interior de la vivienda.
Esto sucede cuando la temperatura es muy diferente entre el exterior y el interior y el agua se hace presente en la parte más cálida, es decir, el interior.

La mejor manera de evitar la condensación es que la vivienda se encuentre bien ventilada, ya sea con la apertura de las ventanas diez minutos al día o con algún sistema de ventilación mecánica.
Una excesiva condensación puede devenir en un deterioro de paredes, cortinas, etc. Aquí también las matizaciones difieren de un material a otro.

Aislamiento Ventanas PVC

El PVC tiene una muy baja conductividad térmica y, de hecho, es considerado un material aislante.
Como tal no requiere de componentes añadidos para garantizar una alta capacidad aislante.

Los perfiles de PVC, eso sí, suelen estar compuestos por varias cámaras de aire que, unidas a la capacidad aislante del propio material, dan lugar a una carpintería que separa a la perfección el ambiente interior del exterior.

La perfilería y todo el conjunto de ventana no requieren prácticamente de manipulación desde su fabircación más allá de la colocación del cristal.

Ello implica que el sellado es prácticamente perfecto dando lugar a una generación de estanqueidad altamente eficiente.

De igual manera, se minimiza la aparición de pequeños defectos o deformaciones debidas a la alteración del material original.

Aislamiento Ventanas Aluminio

Debido a su alta conductividad térmica el aluminio requiere de una serie de procesos que hacen que podamos hablar de aluminio RPT.
Se instalan láminas de material aislante dentro de la estructura del perfil para conseguir esa ruptura que de otra manera no es posible.

El hecho de llevar a cabo la instalación del material aislante implica una manipulación del material original que puede suponer deformaciones posteriores que, evidentemente, pueden suponer problemas de aislamiento al devenir en puntos de fuga térmica.

La correcta manipulación e instalación de las ventanas de aluminio para que mantengan su resistencia y durabilidad y eviten además la transmisión de temperatura y la condensación implica un encarecimiento considerable respecto a una ventana de aluminio simple.

¿Donde tiene ventajas las Ventanas de aluminio?

El aluminio tiene unas prestaciones que lo hacen un material adecuado para algunas aplicaciones, pero poco adecuado para otras.
El aluminio es un material muy ligero y resistente.

Por eso se utiliza, y es muy adecuado en construcciones singulares como muros cortinas, donde las distancias de las barras y el tamaño de los vidrios hacen necesario estructuras rígidas que sean capaces de soportar el peso de todo el acristalamiento y a la vez, aguantar sin deformarse las presiones de viento que se producen en las fachadas. En estos casos, sin duda lo mejor son los perfiles de aluminio.

En países de clima tropical que prácticamente la temperatura es igual todo el año una ventana de aluminio puede ser adecuada.
Una temperatura tropical cercana a la temperatura de confort del cuerpo humano, que da como resultado que la temperatura tanto exterior como interior de la vivienda sea la misma y que permanezca prácticamente constante durante todo el año.

En estos casos, podemos utilizar ventas como las de aluminio de bajas prestaciones térmicas, que no nos proporcionan aislamiento,  ya que realmente en estas zonas tampoco es necesario un gran aislamiento térmico. Son climas en resumen donde no se necesita la calefacción.

Sin embargo, sí que tenemos que tener precaución en el caso que sea necesario instalar equipos de aire acondicionado ya que en ese caso con una ventana de aluminio también tendríamos un problema de aislamiento.

¿Donde es mejor utilizar ventanas de PVC?

El consumidor está teniendo cada vez mayor conciencia y también la ley exige mayores niveles de aislamiento y ahorro energético en la edificación.

Tenemos un código Técnico de Edificación que exige la instalación de ventanas aislantes, y los sistemas de aluminio de baja calidad no cumplen estas exigencias.

Podemos afirmar que en zonas donde existen veranos calurosos e inviernos fríos es donde realmente necesitamos en mayor medida una ventana aislante.

Necesitamos ahorrar tanto en calefacción como aire acondicionado.
En caso contrario los gastos de calefacción y aire acondicionado para tener nuestro hogar a una temperatura confortable, serían disparatados y además esto supone un gran despilfarro energético, dañando el medioambiente y el bolsillo de los usuarios.

Es por eso en nuestro país, precisamente donde entra más en juego el aislamiento de las ventanas.
Un aislamiento que se traduce en mayor ahorro y confort para el usuario.